sábado, 12 de enero de 2013

El arte de curar en forma integral

 
 
El Instituto para la Formación en Medicina y Terapias Antroposóficas (IFMA) ha lanzado una nueva edición del Certificado Internacional de Médico Antroposófico en Madrid. La medicina antroposófica está íntimamente ligada al concepto de prevención como elemento fundamental para cuidar la salud, por lo que también es objeto de esta asociación el desarrollo de actividades que la promuevan.
El IFMA otorga a través de un acuerdo con la sección médica del Goetheanum de Dornach, Suiza, el certificado que reconoce en todo el mundo, que el profesional acreditado ha adquirido los conocimientos necesarios para ejercer, con garantías, la medicina antroposófica.
La representante de Comunicación del IFMA, Julia Mallavia, ha explicado que el objetivo del curso es “formar a médicos en el conocimiento y ejercicio de la medicina antroposófica aunque la formación también es adecuada para otros profesionales de la salud como enfermeros, terapeutas, farmacéuticos y psicólogos, entre otros”. El curso consta de 21 módulos -el próximo será el 10 y 11 de noviembre- repartidos en siete encuentros por año, de octubre a mayo, y está estructurado de manera que se pueda asistir a temas por separado.
Mallavia ha comentado a Noticias Positivas que psiquiatría y pediatría son algunas de las especialidades más populares y que la medicina antroposófica en España “viene experimentando aunque lentamente, un crecimiento tanto en el número de médicos que la practican como de personas que acuden a ella como pacientes”. “Especialmente, en estos últimos ocho años, gracias a la formación de Médico Especialista, el número de médicos ha aumentado considerablemente”, destaca.
Algunas de las metas de la formación son estudiar los fundamentos antropológicos y científicos necesarios para conseguir una percepción ampliada del paciente, que incluya las dimensiones vital/biológica, anímico/psíquica y biográfica/espiritual; observar y estudiar los fenómenos del mundo de los minerales y de las plantas para descubrir sus fuerzas curativas y su empleo como medicamentos y sus procesos farmacológicos.
La medicina antroposófica no sólo busca ampliar la medicina tradicional sino también la homeopatía clásica. Además, coloca en paralelo las terapias artísticas como la euritmia curativa, pintura y escultura terapéutica, musicoterapia y terapia por expresión oral, que considera indispensables para la curación integral del ser humano.
Para la medicina antroposófica, la enfermedad es una expresión de la pérdida del equilibrio entre las funciones orgánicas humanas y sus manifestaciones espirituales. Con el fin de alcanzar la curación integral de un paciente, no se puede limitar a la aplicación de medidas terapéuticas desde lo físico, también debe actuar sobre su pensar y sus emociones. De esta forma, el paciente no es objeto de indicaciones médicas sino sujeto participe de la decisión e igualmente responsable.
 
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(Imagen: Cortesía de IFMA)

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